Cuidando el bambú de la felicidad

Dracaena Sandera fue llamada elocuentemente el bambú de la felicidad. Según el Feng Shui, los brotes, que se rizan maravillosamente, sin duda traerán éxito a la casa. Además, la planta simboliza voluntad e inflexibilidad, lo que la convierte en una excelente opción para regalar o complementar el ramo de un hombre.
Cuidando el bambú de la felicidad No causará muchos problemas. La planta no tiene pretensiones y puede sobrevivir incluso en un simple vaso lleno de agua. Si decides plantarlo en maceta, deberás colocar drenaje en el fondo. La tierra para flores se puede mezclar con arena. Periódicamente, la dracaena debe ser alimentada con un fertilizante especial.
En verano, el bambú necesita un riego abundante, en la estación fría, más moderado. Es mejor elegir agua destilada o filtrada y sedimentada a temperatura ambiente. Si no se sigue esta regla, las hojas pueden volverse amarillas. Bajo el sol brillante, la dracaena se siente incómoda. Colóquelo en un lugar donde la luz sea ligeramente difusa. La temperatura más cómoda es de 18 a 35 °C. No es necesario rociar, pero no olvide limpiar el polvo de las hojas.
No moleste la planta con trasplantes demasiado frecuentes. Es suficiente realizar este procedimiento anualmente, en primavera. El bambú de la felicidad se propaga mediante esquejes de los segmentos superiores del tallo. Necesitan estar enraizados en suelo húmedo o agua.
Si cuidas adecuadamente el bambú de la felicidad, pronto se convertirá en un árbol completo de unos 70 centímetros de altura, con un tallo recto y hojas largas. Se pueden crear hermosas curvas artificialmente. Si prefieres un tallo liso, tendrás que quitar los brotes en crecimiento.
Un pedazo de sur y sol sin duda traerá alegría a tu vida, ¡solo créelo!
Comentarios
Una planta muy original y bonita que encajará perfectamente en un interior de estilo oriental.
¡Gracias!
Una planta interesante y fácil de cuidar. Creo que es una opción adecuada para decorar el interior de una vivienda. gracias por la recomendación.