Plantar y cuidar pimientos.

Plantar pimiento

Plantar y cuidar pimientos incluye varios procedimientos simples, cuya implementación cuidadosa y cuidadosa le permitirá obtener una buena cosecha.

En primer lugar, necesitas conseguir plántulas de pimiento. Puedes cultivarlo tú mismo a partir de semillas o comprar plántulas maduras y fuertes en una tienda de jardinería. En el primer caso, vale la pena pensar en cultivar la planta con anticipación para que las plántulas alcancen el tamaño requerido cuando se planten en campo abierto. El segundo método es más fácil y rápido. Además, al comprar plántulas ya preparadas, se protegerá de preocupaciones innecesarias sobre la germinación de las semillas.

Después de plantar brotes jóvenes, los pimientos deben regarse bien. Vigila la temperatura del agua, debe estar tibia. Si utilizas agua fría para regar la planta, lo más probable es que el pimiento produzca una cosecha más tarde de lo esperado. Cuando hace mucho calor, los pimientos se deben regar con más frecuencia.

Plantar y cuidar pimientos no es posible sin unas condiciones climáticas favorables. A bajas temperaturas, la planta crece lentamente y las altas temperaturas tienen un efecto perjudicial sobre las flores jóvenes y los ovarios de la planta, que simplemente se caen.

El pimiento necesita fertilización, lo que debe hacerse varias veces durante el crecimiento; es especialmente importante hacerlo cuando se forman flores en el pimiento. La urea y el purín son excelentes fertilizantes para los pimientos.

Durante todo el crecimiento del pimiento, es necesario aflojar la tierra bien seca en la base de la planta. También puedes agregar una mezcla de tierra adicional a la tierra principal.