Rúcula
En los últimos años, hemos oído hablar cada vez más de verduras tan poco conocidas como la rúcula. En nuestro país, hasta hace algún tiempo se la consideraba una mala hierba, pero la cocina europea ha hecho sus propios ajustes y hoy la rúcula se utiliza activamente para preparar muchas ensaladas. En este apartado te contamos cómo cultivar esta útil planta en el jardín.
Dependiendo del tipo de suelo, las semillas de rúcula se plantan a una profundidad de 1 a 2 cm y se cubren con una película. Este último se elimina inmediatamente después de la aparición (aproximadamente una semana). Después de 14 días, las verduras se pueden utilizar para decorar platos. La planta puede soportar heladas de hasta -6 C, por lo que se puede cultivar desde la primavera hasta el otoño. Los cuidados del cultivo de rúcula son habituales: regar, quitar las malas hierbas y aflojar las hileras. Encontrarás otros matices dentro de esta sección.
Todo médico sabe qué propiedades beneficiosas tiene la rúcula. Entre ellos, cabe destacar una gran cantidad de vitamina C, yodo, sustancias reductoras del colesterol y sustancias que mejoran el metabolismo. Por eso los europeos, que se esfuerzan por llevar una dieta saludable, aman tanto esta vegetación y la utilizan en todas partes.