Alcachofa de Jerusalén - despensa de beneficios

Por todas partes se pueden ver altas flores amarillas, algo similares a los girasoles. Llaman la atención por su elegante brillo. Y quizás no mucha gente sepa que esta planta es la alcachofa de Jerusalén o la pera de barro. Proviene de los países de América del Sur y en la antigüedad sus raíces tubérculos eran utilizadas como alimento por las tribus indias. Gradualmente pera alcachofa de Jerusalén conquistó el mundo entero. Quizás su cultivo no sea muy común entre los aficionados a la jardinería y la horticultura aquí en Rusia. pero las cualidades beneficiosas y de buen gusto de la alcachofa de Jerusalén no nos permiten olvidarnos de esta planta para siempre.
Las vitaminas y microelementos contenidos en los tubérculos de alcachofa de Jerusalén son sorprendentes por su abundancia. La alcachofa de Jerusalén a menudo se compara con las patatas. Entonces, en términos de contenido de vitamina C y vitamina B, ¡la pera de barro es el doble que el segundo pan! Mención especial merece la tiamina contenida en la alcachofa de Jerusalén. Esto, como dicen, es una vitamina del buen humor y del aumento del rendimiento. Esta planta milagrosa también contiene mucho potasio y magnesio, que son buenos para el corazón, fósforo y silicio, zinc y hierro, cuya cantidad insuficiente afecta el trabajo, el crecimiento y el desarrollo de todo el organismo.
La alcachofa de Jerusalén es una planta maravillosa. No requiere cuidados especiales, simplemente no tolera la alta humedad del suelo. En cuanto al resto, es absolutamente modesto. ¡La alcachofa de Jerusalén puede crecer en el mismo lugar hasta por 30 años! Y al mismo tiempo, mientras crece, deleita la vista con hermosas y brillantes flores.
Las alcachofas de Jerusalén se desentierran de la misma forma que las patatas. Básicamente, sus tubérculos se encuentran a una profundidad suficiente: 30 centímetros. Después de excavar, los tubérculos se pueden cosechar para uso futuro, prepararse con ellos en varios platos para la mesa diaria, comerse crudos y almacenarse frescos para el invierno. ¡Hay muchas recetas para usar la alcachofa de Jerusalén! Además, lo interesante es que puedes encurtir una pera de barro para usarla en el futuro y hacer mermelada con ella.
¡Puedes plantar una planta milagrosa tan maravillosa, hermosa, sabrosa y saludable en tu propia parcela!
¡Buena suerte!