Cuidado adecuado de las plántulas de tomate.

Los tomates son uno de los cultivos hortícolas más populares entre los jardineros y jardineros rusos.

Cuidar las plántulas de tomate no es una tarea difícil, pero requiere ciertos conocimientos y tiempo.

En primer lugar, debes preparar la mezcla de tierra. Ahora las formulaciones procesadas y preparadas se pueden comprar en tiendas especializadas. La tierra se vierte en contenedores, ligeramente compactada. Para desinfectar, el suelo se vierte con una solución no demasiado concentrada de permanganato de potasio.

Las semillas se plantan en hileras de 1,5 cm de profundidad a una distancia de 5 cm entre sí. Los recipientes cubiertos con film o vidrio se colocan en un lugar cálido hasta que aparecen los brotes, después de lo cual se retira el film y los recipientes se trasladan a un lugar fresco y luminoso. Las plántulas no se riegan con demasiada frecuencia, sino con regularidad, generalmente una vez a la semana.

Las plántulas se trasplantan 3 semanas después de la germinación. Se plantan plántulas, profundizándose hasta las hojas de los cotiledones. Durante este período, es mejor proteger las plántulas de la luz solar directa. Y para prevenir enfermedades, puedes rociar una vez a la semana con leche diluida en agua.

2 semanas después del trasplante, las plántulas se pueden alimentar con fertilizante especial o excrementos de pájaros. Los excrementos se diluyen en agua caliente en una proporción de 1:20, se filtra la infusión y se fertilizan las plántulas con ella después del riego.

Dos o tres semanas antes de plantar, las plántulas comienzan a endurecerse exponiéndolas al aire libre durante 2 horas todos los días. El día antes de la siembra, las plántulas se endurecen al aire libre durante 24 horas.

El cuidado adecuado de las plántulas de tomate puede ser la clave para una cosecha abundante y de alta calidad.